domingo

Mi gran noche

Una vez más uno de los directores  más valorados de nuestro panorama cinematográfico actual ha vuelto a conseguirlo. El director vasco Álex de la Iglesia nos trae un nuevo largometraje tras el éxito rotundo que cosechó su última película “Las brujas de Zugarramurdia“, estrenada en el 2013, y que separándose mucho de la temática de su antecesora, consigue ser una de sus películas más entretenidas.
En esta ocasión el director ha apostado por llevar a la gran pantalla algunas de las realidades sobre la producción de programas o especiales televisivos con “Mi gran noche“, una película desternillante que sazonada con una crítica a algunos aspectos de la sociedad del momento nos traslada al plató de rodaje de un especial televisivo para la Nochevieja 2015 y dar la bienvenida al 2016.
El director de grandes películas españolas como “El día de la bestia“, “Acción mutante” o “Los crímenes de Oxford“, producción para la que se trasladó a la propia universidad de Oxford para filmar este thriller protagonizado por Elijah Wood y John Hurt, vuelve a tomar las riendas directivas tras un descanso del largometraje que se vio cubierto por un documental sobre la vida del futbolista Leo Messi que el director filmó tras “Las brujas de Zugarramurdi” y antes de sumergirse con la producción de “Mi gran noche“.
Se podría decir que el realizador cada vez se aleja más del género fílmico que le vio comenzar en el mundo del cine para explorar nuevos mundos del séptimo arte siempre muy bien acompañado de algunos grandes actores del panorama nacional y sus actores fetiche presentando al cantante Raphael como protagonista estelar y actor revelación con la nueva película de su amigo Álex de la Iglesia, que lleva el mismo nombre que una de sus canciones más famosas.

La película desarrolla todos sus acontecimientos en un plató televisivo en el que llevan un par de semanas rodando el especial de Fin de año que despedirá el 2015 y dará la bienvenida al año 2016 por todo lo alto. Horas y horas de rodaje, comida falsa, personas falsas y una gafe entre los figurantes que hacen las veces de público serán los grandes ingredientes de esta nueva comedia de Álex de la Iglesia.
Todo comenzará cuando, en pleno mes de agosto y con varias semanas de rodaje del especial ya encima, uno de los figurantes resulte lesionado en pleno plató por culpa de la gafe de la mesa en la que se sienta. A contrarreloj por seguir rodando, el equipo de producción deberá buscar un sustituto para el sitio que ha quedado libre en la mesa y poder seguir rodando el especial 2016 con la mayor de las normalidades posibles.
Cuando por fin dan con un sustituto, la situación que hay fuera del plató del rodaje no sirve para mejorar todas las vicisitudes que tienen lugar dentro. Y es que el despido de casi 500 trabajadores de la cadena televisiva y los seguidores del cantante Alphonso se han acumulado a las puertas del plató para manifestarse o esperar ver a su ídolo y han acabado iniciando una batalla campal contra la policía a plenas puertas del sitio de rodaje.
Mientras tanto, en el interior, las excentricidades de los presentadores y de Alphonso, que exige el número estrella de la noche justo tras las campanadas, solo servirán para aumentar la tensión y caldear más el ambiente. En todo esto, la otra estrella de la noche, el joven cantante Adanne, que sin tener más de dos dedos de frente es todo un fan de Alphonso, tendrá que lidiar junto a su representante con una situación muy peliaguda en la que unas fans y el propio Alphonso, de manera separada, les han metido.
Con muchos personajes e historias independientes pero conectadas sucediendo a la vez en el mismo momento, se van presentando una serie de acontecimientos que complicarán más y más el rodaje y la finalización del especial Fin de año, situación en la que la presencia de la gafe y el nuevo figurante sustituto solo servirán para ir complicando más y más, a la que habrá que añadir un intento de asesinato de Alphonso por parte de su propio hijo, Yuri.

Muy correctamente filmada, con unos planos típicos de la televisión para hacer aún más realista lo que ocurre en la película, combinados con más complejos planos de cine hacen que ambas disciplinas converjan en la pantalla con esta nueva película de Álex de la Iglesia.
El elemento cómico es algo muy presente en toda la película que la confiere una mayor personalidad y diferenciación. Un humor inteligente combinado con los toques de humor absurdos que emanan de los personajes más simples de la película dan al espectador donde elegir a la hora de generar la carcajada.
Muy recomendable para los seguidores del cine español,  o de los trabajos de Álex de la Iglesia. No estamos hablando de la mejor película del director, pero sí hay que reconocer que es una gran película que demuestra un gran gusto fílmico y una perfecta habilidad de coordinar todos los elementos frente y tras las cámaras que el espectador disfrutará y sabrá verse recompensado gracias al buen rato que se pasa viendo la película.